La complejidad de muchas estructuras empresariales suponen un reto para la sistematización de las mismas en un documento descriptivo que explique la realidad de su funcionamiento.
Un organigrama es un documento empresarial que refleja la estructura de una compañía y el orden de su personal. Hay diferentes tipos de organigramas de empresa, y la utilización de un modelo u otro depende de la forma de trabajar de cada compañía, su área de negocio, y su tamaño.
Aunque no existe una obligación legal que exija a las empresas contar con un organigrama, su implementación es recomendable, incluido en negocios pequeños.
Los tipos de organigrama de empresa más comunes
Antes de presentarlos, es importante enfatizar que el organigrama debe reflejar la estructura real de la organización, y no al revés: primero debe construirse una buena organización, y luego representarse en un organigrama.
Organigrama jerárquico (vertical y horizontal):
Son los organigramas que se organizan de forma jerárquica.
- Organigrama vertical: se construye de arriba hacia abajo. En la cima está el CEO y conforme se desciende, se organizan los puestos con menor nivel de responsabilidad.
- Organigrama horizontal: se representa de derecha a izquierda. El mayor cargo está a la izquierda, y a la derecha se encuentran los demás empleados, organizados por su nivel responsabilidad.
Ambos modelos se suelen utilizar en grandes compañías tradicionales, donde hay una jerarquización presente. El horizontal a simple vista parece más colaborativo y no tan estructurado, no obstante, ambos modelos son muy parecidos.
A continuación se muestra un ejemplo de organigrama vertical y horizontal realizado en Excel:

Un ejemplo de organigrama jerárquico sería este presentado, donde se muestra una compañía muy rígida y definida, donde la junta directiva solo se comunica con la CEO, quien a su vez solo interactúa con la junta y su asistente ejecutivo. Este asistente es el único enlace con los departamentos ejecutivos, los cuales no tienen contacto directo ni con la CEO ni con la junta.
¿Qué pasaría si los organigramas jerárquicos se invirtieran? Si los empleados estuvieran en la parte de arriba del organigrama vertical o a la izquierda en el horizontal, estaríamos ante un organigrama invertido u organigrama de liderazgo invertido, perfecto para empresas más modernas que quieran mostrar que los líderes están al servicio de los empleados y que piensan que la base del éxito de una compañía comienza desde los cimientos.
¿Se puede combinar el organigrama vertical y el horizontal? Por supuesto, los organigramas no son rígidos. Lo importante es que el organigrama se adapte a la organización, y no que la organización se acomode al organigrama.
Organigrama Matricial
Son organigramas que combinan dos tipos de estructuras que generalmente son: funcional (por departamentos) y por proyectos o productos.
Por esta razón, el organigrama matricial es perfecto para empresas que tienen 2 responsables, y varios proyectos simultáneos, ya que visualmente deja muy claro quiénes son los máximos responsables de cada proyecto y quienes participan en ellos.
A continuación se muestra un ejemplo de organigrama matricial realizado a través de una plantilla de Canva:

El área de producción es un gran ejemplo de lo útiles que son estos organigramas cuando existe más de una figura de autoridad. Funciona por proyectos, y cada uno cuenta con dos jefes, depende del proyecto se contará con un jefe u otro.
¿Qué pasaría si el organigrama matricial tuviera más de dos estructuras? Pues que recibiría el nombre de organigrama multidimensional u organigrama multimatricial. Perfecto para organizaciones muy complejas donde los proyectos cuentan con varios responsables, no obstante, este tipo de organizaciones podrían tener conflictos de autoridad ya que los empleados tienen más de 2 encargados o superiores a su cargo.
¿El organigrama matricial debe seguir siempre la estructura funcional y por proyectos? No. Lo importante es que el organigrama se adapte a la organización. Si otra combinación refleja mejor su funcionamiento, también es válida.
Organigrama funcional y divisional
El organigrama funcional divide la compañía entre funciones y el divisional fracciona la empresa según productos, regiones o mercados, donde cada división tiene su propio equipo y recursos.
El organigrama funcional es idóneo para compañías con varias funciones (marketing, recursos humanos…) y el organigrama divisional es recomendado para empresas que aun sin ser grandes están muy divididas entre productos, regiones o mercados.
A continuación se muestra un ejemplo de organigrama funcional y divisional realizado en Word:

Este departamento comercial es un buen ejemplo de organigrama divisional y funcional: ya que se divide en dos áreas: en ventas, donde los comerciales se especializan según el tipo de cliente (organigrama divisional), y en marketing, organizado por funciones específicas según la actividad de cada profesional (organigrama funcional).
Organigrama circular
El documento de un organigrama circular tiene como centro la persona o el departamento de mayor responsabilidad, y entorno a este se encuentran los demás departamentos o personas.
El organigrama circular es muy utilizado en empresas pequeñas que quieren potenciar el trabajo en equipo. Su estructura flexible permite que los roles no sean rígidos, lo que favorece la polivalencia de los empleados y la colaboración entre distintas áreas.
A continuación presentamos el último ejemplo de organigrama realizado a través de Canva:

El departamento administrativo cuenta con un organigrama circular, diseñado para fomentar la colaboración entre todos los miembros del equipo. La máxima figura de autoridad en el departamento es el Coordinador del Departamento de Administración.
Organigrama mixto, la forma idónea para un equipo bien organizado
Como se ha explicado al inicio del artículo, el organigrama se debe adaptar a la compañía, y no al revés. Por esa razón, aunque en la teoría existan diferentes tipos de organigrama, en la práctica la mayoría de las compañías optan por una estructura híbrida que combina varios tipos de organigrama, ya que de esta manera se puede reflejar de forma mucho más precisa cómo se estructura una compañía y su equipo humano.
Cuando se integran distintos tipos de organigrama, se da lugar a lo que se conoce como un organigrama mixto.
Un ejemplo de organigrama mixto sería, el que combina primero un organigrama jerárquico (horizontal y vertical) para los puestos de mayor responsabilidad, donde se necesita una clara jerarquización para evitar conflictos de interés; seguido de otros organigramas de cada departamento, por ejemplo:
- Producción utiliza un organigrama matricial, ya que gestiona varios proyectos con distintos responsables simultáneamente.
- En el área comercial, se aplica un organigrama funcional y divisional, dada la diversidad de tipos de clientes y la especialización de tareas por profesionales.
- Por su parte, el equipo administrativo, que cuenta con pocos empleados que trabajan en estrecha colaboración, adopta un organigrama circular para fomentar el trabajo en equipo y la ayuda mutua.
Este ejemplo refleja los tipos de organigrama de empresa presentados en la primera sección de este artículo.
Cabe destacar que no todas las empresas deben optar por un organigrama mixto como el presentado, ya que cada empresa es diferente, y por lo tanto hay que estudiar su caso en particular, para saber qué tipo de organigrama le conviene.
¿Qué tipo de organigrama necesita mi empresa? ¿Cómo se hace?
Se puede hacer un organigrama gratis y fácilmente a través de una plantilla de Canva o por programas de Microsoft (Excel, Word y PowerPoint).
En todos los programas de Microsoft, el procedimiento para insertar un organigrama es similar: hay que ir a la pestaña «Insertar», seleccionar el apartado «SmartArt» y elegir una de las gráficas clasificadas bajo la categoría «Jerarquía». Si ninguna de las plantillas predeterminadas se ajusta a tus necesidades, siempre puedes buscar otras opciones en línea.
El organigrama a elegir (jerárquico, matricial, funcional y divisional, circular) o una combinación de algunas de ellas (mixto), depende de las necesidades de su empresa, le mostramos 3 preguntas sencillas para poder decidirse por un modelo u otro:
Tamaño del negocio: Las empresas pequeñas pueden optar por organigramas simples, como el circular, sin embargo las grandes deben optar por estructuras más complejas como la matricial o mixta.
Grado de jerarquía requerido: Si necesita un alto control jerárquico, lo mejor es el organigrama jerárquico.
Diversidad organizativa: Las empresas con varios tipos de proyectos, clientes o funciones, funcionan mejor con el organigrama matricial (si tienen varios jefes por proyecto) o con el organigrama divisional.
También se puede hacer un organigrama por IA, con programas gratuitos online como Gemini. Basta con informar a la IA sobre a lo que se dedica la empresa y cómo organiza su equipo humano, para que te genere un organigrama automático. No obstante, siempre es recomendado que el organigrama lo realice personal de recursos humanos, o en su defecto, un trabajador que conozca muchísimo la empresa y su forma de trabajar.
Ejemplos de organigrama en empresas
Para finalizar, presentamos algunos ejemplos de empresas junto con sus respectivos organigramas:
Tipo de empresa y organigrama recomendado | Justificación |
---|---|
Organigrama horizontal para startup | Fomenta la colaboración y agilidad. |
Organigrama circular para agencia de publicidad o de marketing | Perfecta para equipos creativos con poca estructura jerárquica |
Organigrama mixto para fabrica | Requiere control jerárquico (organigrama vertical) y varios proyectos con diferentes encargados (matricial) |
Organigrama mixto para empresa multinacional | Combina diferentes organigramas dependiendo de las necesidades de cada departamento. |
Organigrama vertical para un banco | Un banco necesita control estricto y jerarquía clara. |
Organigrama divisional para empresa retail | Las empresas retail tienen una gran variedad de productos y distintas tiendas de ropa. |
Organigrama para micropyme o pymes | Se recomienda un organigrama jerárquico en negocios familiares con roles definidos, y uno circular en empresas con equipos multifuncionales y colaboración constante. |
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